El Análisis transaccional es una teoría creada por el canadiense Eric Berne durante los años 50, a partir de las observaciones que había hecho en psicoterapia de grupos. Aunque Berne afirmaba tener posiciones que divergían del método psicoanalítico, se evidencia la influencia de este método en la manera en que se conformaron los fundamentos de su teoría.
Para muchos, el análisis transaccional no es sólo una teoría sobre la personalidad, sino de la comunicación, pues ayuda a la comprensión y la mejora de las relaciones entre las personas, ya que trata de explicar la conexión que existe entre los mensajes, prohibiciones, permisos, mandatos y caricias que una persona recibe desde muy pequeño, y las posiciones que asume sobre su existencia, quién es y cómo se supone que debe ser él o ella misma, las demás personas y la propia vida.
Análisis transaccional de la psicología
De acuerdo a esta teoría, las personas actúan basados en estas percepciones, y a partir de allí establecen relaciones con los otros que pueden ser enfermizas o saludables. Estas relaciones, así como los roles que cada uno juega en ellas, vienen a afianzar las posiciones existenciales de la persona.
Ahora bien, de acuerdo con Berne una transacción es la unidad de base para medir las relaciones sociales, y estas transacciones ocurren al tiempo que se manifiestan, y coexisten, tres estados en la misma persona. Estos estados del yo son Padre, Adulto y Niño, y cada uno constituyen aspectos de la personalidad:
- La extereopsiquis, se constituye de las normas y valores introyectados por la persona, y que han sido impuestas desde su niñez. Estos valores intervienen en la forma en que la persona percibe a los otros y se relaciona con ellos. Está relacionada con el padre.
- La neosipsiquis, se conforma en la forma racional y centrada en la que se valoran las situaciones que ocurren.
- La arqueopsiquis, está fundamentada en algunas reminiscencias de la niñez que aún se encuentran presentes en el adulto.
Análisis transaccional de la personalidad
El Análisis Transaccional facilita a la persona el conocerse y reconocer cómo está conformada su personalidad a partir de la toma de consciencia acerca de todo lo que ha introyectado a lo largo de su vida, y cómo esto ha influido en el desarrollo de sus percepciones sobre sí mismo, sobre los demás y su manera de interactuar con ellos. Además, permite el análisis de los tipos de transacciones que se desarrollan en las relaciones que tiene con los otros y los posibles juegos psicológicos y roles (Padre, Adulto, Niño) en los que participa al relacionarse con otras personas.
Una vez que la persona puede clarificar estos elementos, entonces es capaz de tomar decisiones sobre su vida al encontrar su verdadero “yo”, ya que puede reconstruir la percepción propia, anteriormente formada por el “mito” creado por estos valores que fueron introyectados.
Al tener consciencia de ellos y de las transacciones que mantiene con otras personas, puede encontrar formas más sanas de dar caricias y de recibirlas, dejando de lado los “guiones” nocivos y los roles predeterminados.
Análisis transaccional del ser humano
De manera que, gracias al Análisis Transaccional, la persona es capaz de ser ella misma, de ser autónoma. Además, el Análisis Transaccional le permite que esté en capacidad de formular metas y expectativas realistas que le darán un propósito para su existencia, así como también el desarrollo de un sistema ético para la toma de decisiones en su vida.
El análisis transaccional como método requiere:
- Recabar toda la información necesaria para analizar la transacción.
- Determinar quién (Padre, Adulto, Niño) dirige el estímulo transaccional.
- Determinar cuál estado del ego (Padre, Adulto, Niño) se activa en la respuesta transaccional.
- Representar en diagramas, con vectores, la dirección del estímulo y la respuesta transaccional.
- Dar nombre a la forma de transacción.
- Aportar el significado de la esencia de la transacción más allá de la temporalidad en la que ocurre.
Ejemplo de análisis transaccional.
Un ejemplo de transacción que puede analizarse a partir de esta teoría es la relación complementaria Niño-Padre (N-P). Este tipo de relación está basada en la admiración que surge porque el Niño se ha quedado maravillado ante la energía y la fuerza del Padre. Algunas personas aceptan la admiración, haciéndola una experiencia de valor para ambos, proporcionando verdaderos modelos para la vida. Mientras que otros o bien la rechazan por parecerles molesta, o sacan provecho de esta relación.
Al analizar este tipo de transacciones, el Análisis Transaccional definitivamente permite el crecimiento y desarrollo personal, ayudando al ser humano a conocer su verdadero yo y a actuar en consecuencia.
